domingo, 11 de febrero de 2018

Ley natural en Boyera resguardo de Cumbal parte 1

Memoria Histórica de Boyera 1


La siguiente es una transcripción textual de la memoria histórica de la vereda Boyera (el huaico chiquito), en el resguardo indígena de Cumbal, de una duración de más de 5 horas, lo que aquí está escrito será solamente lo estrictamente historia y relatos de la recuperación de esta finca, y que después se convirtió en vereda de este territorio.

Omitiré las palabras "gracias a dios, gracias a nuestro señor (dios), gracias a la virgen santísima, y sinónimos", por el hecho de que maltrata el pensamiento propio, la esencia de vida cosmogónico y destruyeron en un 90% (sin exagerar) de la cosmovisión indígena de los Pastos.

Agradecimientos especiales al compañero Jóse Salomón Cuaical quien aportó con el audio, como parte de su aporte con otro granito de arena a la herencia milenaria que ha estado presente en nuestros mayores, porque el pensamiento Pasto, la memoria no es nuestra, es herencia de nuestros taitas y mamas (mama así, sin tilde como lo acostumbramos a decir los indígenas, porque el valor que le damos a mama, es mayor al de decir mamá, a pesar de que es una anglisismo español retomado por los indígenas, pero que para los indígenas, mama, es sinónimo de sabia). Pai por ese granito de arena amigo Cuaical.

Esta minga de pensamiento denominada "Memoria histórica de Boyera" fue realizada por la regidora de esta vereda Nubia Alpala, en la Institución Educativa Yo Reinaré en la misma vereda y a quien agradeceré enormemente el acompañamiento a los jóvenes, el bonito caminar, y el hecho que le haya visto la importancia de recuperar esta historia, aportando un granito de arena a la gran investigación que hay sobre la cosmovisión de los cumbales, ejemplo de liberación de la tierra para los demás pueblos indígenas en Colombia y América Latina.

Cabe anotar que estos relatos cuentan desde 1975 en adelante, aunque los cumbales ya habían realizado otras llamadas "recuperación de tierras" desde 1970 con la finca de "El Zapatero". Y qué, Cumbal junto con el resguardo de Silvia en el departamento del Cauca, fueron las primeras comunidades indígenas en recuperar la tierra en Colombia.


Las fincas recuperadas que hacen parte de esta vereda son, Guamialamag I, Guamialamag II (hoy colegio Cumbe), El Cuayal, Las Playas, El Laurel, Cuaspud el Rejo, Las Vueltas, y la Boyera. 


Patricia Díaz, Regidora San Martín y Miraflores: La vereda San Martín y Miraflores son veredas hermanas, ya que ambas fueron creadas el mismo tiempo. Anibal Alpala de Cuetial, 
Luis Chicaiza director pueblo Cayambi, es el mismo pueblo, las mismas costumbres, la misma historia, hace más de 500 años, un grupo invadió nuestro territorio, y hace muchos años había que festejar el día de la raza, y nos daban vacaciones, hasta conversar con nuestros mayores, ese día es el día de oprimir nuestros pueblos a quitarnos nuestra Pachamama, los españoles, gracias al gran esfuerzo de nuestros abuelos esto se ha ido eliminando (…). 


Luz Angélica Tarapues de la Escuela de Derecho Mayor: Saludar a nuestras autoridades (…), es grato estar en este día, 12 de octubre, no es un día para celebrar, más sin embargo es para reflexionar, porque nosotros, durante todos estos años y estos tiempos, hemos venido permitiendo, que sigamos siendo colonizados, aún seguimos colonizados nuestra mente, y estos espacios es para reflexionar, descolonizar el pensamiento, porque nuestro pensamiento está colonizado aún, no creemos en esos usos y en esas costumbres, que nos han impuesto en nuestros pueblos indígenas, se cree más bien en esa sabiduría que hay en nuestras tierras ancestrales, que hay dentro de hombres y mujeres, estamos copeando lo de afuera, por eso, estas mingas de pensamiento nos sirve para reflexionar, pero también para retornar, para danzar, y como ya lo dijeron, a nosotros en las escuelas nos enseñaron que hoy es el día de la raza, cuando realmente nos vinieron a masacrar, nos satanizaron los usos y nuestras costumbres, especialmente cuando se ejerce la parte espiritual.


Cuando se ejerce la medicina tradicional, se hace una persecución, y esa persecución, y ahora sabemos que la encabeza la iglesia católica, y con eso no queremos decir que nosotros no tuvimos una espiritualidad (…). Algunos sacerdotes están diciendo, que el danzar en el petroglifo de los Machines, en la Laguna, a nuestros espíritus mayores, que hacen parte de nuestro territorio, es danzar al satanás, ese donde vamos a dar gracias por el agua, por la comida, por la salud, por la pervivencia como pueblos, y dicen los padres, que nosotros no debemos celebrar, si no manifestar, y dar a conocer nuestros derechos, si vamos a conocer esos derechos, también, desde afuera dan a entender, que debemos entender el derecho de afuera, pero también debemos entender el derecho de adentro, por eso, se tiene que ser dinámico, el espiral cósmico, del ir y del venir, es de vida importante defenderlo, entonces esa recuperación de nuestros derechos, es vivir dentro de nuestros territorios, y ejercer lo que dentro de esos territorios se aprende, esos buenos usos y esas buenas costumbres, para el buen vivir, para el vivir bonito, y vivir bonito no solamente es entre nosotros sino, es estar en equilibrio y en armonía con el territorio, respetando, y que no solamente nosotros cuando hablamos de la defensa de nuestros derechos, hablemos también y defendamos, cuidemos la madre territorio, tenemos que volvernos guardianes del agua, se habla mucho, de la mama yaku (agua), de la madre tierra, ¿Qué estamos aportando a ella? nosotras como mujeres tenemos que hacer un trabajo importante de proteger la madre agua, símbolo de vida, ella germina la vida, desde nosotras las mujeres, y que se dinamiza, ese pensamiento cosmogónico, como es el espiral cósmico, cuando se dinamiza ese pensamiento, esa estrecha relación que tiene la mujer con la madre tierra y la madre agua, cuando esa vida cíclica, y es bien importante entenderla, nosotros entendemos esa cosmovisión, que amamos y respetamos, el agua, entonces no vamos a quemar el páramo.


Entonces no estamos pensando, en esos cultivos, o en esos monocultivos, que simplemente nos hizo creer la colonización, de tener plata, acaparar plata, para lograr el poder, pero realmente después dentro de un tiempo, ¿esa plata va a solventar esas necesidades? ¿será que cuando nuestros hijos, nos reclamen, nosotros les vamos a dar $10.000, $100.000, para que mitiguen el hambre?, la verdad, no vamos a poder solventar esas necesidades, y que nuestro pensamiento, por eso se tiene que abrir estos espacios y estos sirven para reflexionar, ¿cómo esa colonización viene y nos cambia el pensamiento, de acaparar, de imponer de influir, de la ambición y sobre todo el poder, que cuando tenemos más dinero, somos más grande que los otros, y que también aquí en el resguardo, todos somos iguales, todos le decimos a esa madre territorio, hacemos parte, somos otros seres más de la naturaleza, por lo tanto cuando hablamos de la madre tierra tenemos que amarla, respetarla, venerarla, y protegerla, en nuestra visión como indígenas, ese es el llamado, esa es la esencia que, debemos de tener en nuestros corazones, nuestra alma, nuestro cuerpo y nuestro espíritu, defenderla, y no que solamente se pierda en una filosofía, y en un dicho y cuando realmente estamos haciendo lo contrario.


Entonces, estas mingas que nos sirva para recapacitar, pero para pensar, porque para no solo tenemos que estar solo en la reflexión, aquí nos han matado nuestro pensamiento, pero tenemos que retornar, y pai a esos mayores que pasaron, por esa lucha que dieron, que ellos, tuvieron que pasar muchas cosas difíciles, y cuando, uno mira esos documentales, sobre esa represión, ese sufrimiento, ahí a uno le duele, y el niño llora, y entonces habremos personas que, tenemos mucho resentimiento con la iglesia católica, porque es que nos pusieron de rodillas, a rezar, nos volvieron esclavos, nos pusieron la cruz al revés, nosotros somos, como alguien dijo, “somos de la cruz del sur”, y la cruz, no es como ya nos la han enseñado, que eso significa fuerza, sabiduría, no es cualquier cosa, mientras que a nosotros nos vinieron a enseñar a persignarnos, a arrodillarnos.


Como dijo la señora regidora de San Martín y Miraflores, “antes, esos bastones, se otorga a los indios, a los naturales, a los salvajes, como nos dijeron, pero solamente era para ser mandaderos, para ser peones, y para ser vulnerados”, porque antes no podían hablar (no tenían el derecho a hablar por ser animales sin alma, y luego menores de edad); que tal una mujer en esos tiempos hablando, no tenía derecho, entonces era un símbolo de humillación, para que sea símbolo de servidor, mandadero de la iglesia, para que seamos encomenderos, para eso era. Pero después, la autoridad en su sabiduría, que la tienen gracias a esa espiritualidad dentro de los territorios, viene y toma eso, y lo empodera, y lo voltea a la otra manera, porque de alguna manera, el hombre blanco, el hombre mestizo no se daba cuenta, que esos bastones a lo mejor tenían un poder, porque les da una investidura a ustedes señores autoridades al empuñar un bastón, una vara de mando desde esa investidura de sabiduría, cuando hacen esa conexión cuando van a posesionar Chiles, están haciendo una conexión espiritual entre, ese mundo espiritual de arriba y esa madre tierra, cuando la fina, cuando lo posesionan, entonces allí, ese a donde, ciencia, o ese espíritu mayor, les da la sabiduría para que entiendan, y entonces vayan entendiendo ese derecho natural, desde la ley natural, desde esa cosmovisión, y allí entonces empieza a toda una esencia que desprende después en usos y costumbres, y después nuestra cosmocracia, empieza a desarrollarse con otro pensamiento, y un pensamiento totalmente de afuera.


Nuestros pueblos originarios son naciones, y que, gracias a ese modelo, de nación de gobernabilidad, entonces el hombre mestizo viene copia. Pero a nosotros, aún nos sigue esclavizando, aún estamos arrodillados, porque nosotros, no creemos en la educación propia, no creemos, porque ahorita que estamos trabajando, aportando lo poquito que sabemos, para la ley mayor, y muchos no estamos creyendo en eso, ¿por qué?, porque, es que lo de afuera vale, lo de afuera, allá se inventan todo, las cosas, todas las leyes, y nosotros, nadie dice nada, nadie protesta, pero eso, lo copio de los pueblos indígenas para vivir formalizados, y entonces, es ahí donde los pueblos indígenas debemos tener una ley mayor, en la cual nos permita regirnos y poder, convivir y vivir en armonía, alegría y en equilibrio, para eso es la ley, no para aplastarlo del uno al otro, si no es para podernos, entre nosotros respetarnos y respetar la madre territorio, porque no podemos entrar y salir cuando queramos, tenemos que tener una norma, y esa norma nos está diciendo, nos está diciendo la ley natural, la ley mayor, desde allá nos dice.


Aquí nadie nos tiene que enseñar, la ley natural dice que, si hay la noche tiene que haber el día, que si está lloviendo tiene que salir el sol, entonces, ese es el entendimiento que da, y entonces, esa es una copia que tenemos que tener, porque es ley natural, y regirnos de que tenemos que tener una ley, de autogobernarnos. Entonces, ese, es como el trabajo que tenemos que hacer, con pensamiento y como pueblo indígena, pero nosotros muchas veces estamos copeando, de lo de afuera y cada vez, nuestro pensamiento, está débil, espiritualmente estamos débiles, porque no estamos creyendo en lo nuestro, en lo que construimos nosotros, para el bien vivir, para el vivir bonito, lo estamos construyendo.


Esto lo hemos venido haciendo, y no solo sirve para reflexionar y dejarlo ahí, si no en la reflexión, sino en la acción, lo accionar, porque tenemos que demostrar, tener y cambiar todo esos modelos educativos, dentro de nuestra nación (territorio), nosotros finalmente nos vinieron a imponernos a todos, que la educación se tiene que ser así y así, tiene que ser, pero si nosotros, tenemos que hacer una educación propia, una educación de acuerdo a nuestro pensamiento, aquí hay todo, aquí está la ciencia, la ciencia desde la shagra, desde el tejido, desde el fogón, desde esta minga, desde todos los espacios líricos, allí está todo, esas materias que nos enseñan, y que incluso, esa educación, es nativa, ni si quiera es un modelo, creado aquí en Colombia, si no, copeado, y que ese modelo nos viene a marginar y lo único que nos ha venido a enseñar, es a ser esclavos, a ser peones, la educación superior es enseñarnos a sentir, a ser mandaderos, pero no nos está enseñando a ser autosostenibles, para desarrollar empresa. 

Pero nosotros los pueblos originarios, si nosotros revisamos la historia, nos han enseñado a ser, biólogos en tres años, a sostenerse, dentro de los territorios, en economía autónoma, propia, la cual nos permita seguir viviendo, hay mucho que hacer, pero que hay que aprovechar entonces, todos esos escenarios, esa educación de afuera, y articularla a la nuestra y sustentarla, y nosotros tenemos grandes potencialidades, nuestros hijos e hijas, van a ser muy grandes desde el punto de vista, si rescatamos lo nuestro, porque aquí hay mucho saber, mucha sabiduría y que hay que aprovecharlo, cosas que como hombres y mujeres nos sintamos orgullosos de serlo, y que somos, porque no estamos pensando como occidente, que nosotros solo tenemos que nosotros teneos que coger solo lo de afuera, lo de afuera y lo de afuera, no, nos quedemos en eso, en lo que tenemos que convivir, claro que tenemos que convivir con la iglesia, nos toca que convivir con la administración en familia, de todo lo que hay. 


Entonces, mi invitación es, para que en estos espacios, sigamos manifestándonos algunos eventos, en las mingas (…), tejamos, las mujeres tejamos, las mujeres somos la esencia de los pueblos, tejamos, enseñemos, a nuestros hijos, nuestros compañeros, porque a veces decimos que, o nos vivimos quejando, también decimos que, es que el guagua ya no saluda, es que ellos esto, pero si en la casa no estamos enseñando, el respeto a los mayores, el escuchar, el enseñar legible, y de su alrededor, si no estamos enseñando, entonces, que culpa tiene el guagua, o que culpa tiene el joven después, vamos a ver los cabellos como chupado de mango, y con unas modas que son de afuera, y que lo que tenemos acá dentro, decimos que no, que eso es feo, pero que otras personas lo valoran, otras personas si quieren, quieren y morirían por ser como nosotros, y nosotros de acá no valoramos, y sólo copeamos, copeamos y copeamos, pero que vendemos nosotros de acá dentro, entonces, es como avanzar, rotar y retornar las cosas, y pues, entonces, retornemos y hagamos como estas fechas del 12 de octubre, que a mí también me enseñaron, que era el día de la raza, hacían actividades, una jornada de recreación y bueno, que teníamos que, agradecerle a Cristóbal Colon, porque gracias a él se descubrió América. 


Lo que vinieron no es a descubrirnos a nosotros, si no es a robarnos, lo que vinieron es a usurparnos, a eso vinieron, y acabar con nosotros, con los pueblos indígenas, y que aún sigue todavía, si nosotros hacemos un análisis político, ahí se ve como estamos todavía, estamos bajo el yugo todavía, entonces ¿cómo salimos de esa resistencia?, hay que proponer, hacer mandatos, pronunciarnos, ya no queremos estar siempre como esclavos, si no es que, entre nosotros podamos vivir en armonía. Agradecer (…).


Pai por leer.